Viajar a Kirguistán con Temps d’Oci es sumergirse en un país donde la naturaleza domina el paisaje y la vida nómada sigue marcando el ritmo del día a día. Nuestro itinerario arranca en Bishkek, una capital rodeada de cordilleras imponentes, y continúa hacia el legendario lago Issyk-Kul, un mar interior rodeado de picos nevados. En la zona de Cholpon-Ata descubrimos sus antiguos petroglifos, testigos silenciosos de antiguas civilizaciones.
El viaje nos lleva también a Karakol, famosa por su arquitectura multicultural, donde destacan la mezquita Dungana y la iglesia ortodoxa de madera. Desde aquí nos adentramos en algunos de los escenarios naturales más sorprendentes del país, como el Cañón de Jety-Oguz y el singular “Cañón de los Cuentos de Hadas”, dos paisajes que parecen sacados de otra era.
En Kochkor conectamos con la esencia nómada aprendiendo sobre la elaboración de yurtas y alfombras tradicionales. Más adelante, Tash Rabat —un histórico caravasar de la Ruta de la Seda— nos invita a imaginar el paso de comerciantes y viajeros que cruzaban Asia Central siglos atrás. El Parque Natural de Chon-Kemin añade el toque más verde al recorrido, con valles extensos y vida rural auténtica.
La ruta culmina de nuevo en Bishkek, donde visitamos la Torre de Burana y otros lugares clave para comprender la historia del país.
Un viaje en grupo organizado por Temps d’Oci, pensado para quienes desean descubrir la naturaleza salvaje de Asia Central, su legado histórico y la amabilidad de un pueblo que mantiene vivas sus raíces.
